Como siempre, termine cediendo y dejándome llevar por la corriente. Resisto al principio, pero luego caigo derrotado. Me pasó hace un par de años, cuando todos tenían teléfonos celulares y yo me rehusaba a utilizarlo, negándole el rol imprescindible que se le atribuye en la actualidad; pero a la segunda o tercera reunión que se suspendía o cambiaba de lugar a último momento (y siendo el único que no pudo enterarse) terminé cediendo y comprando uno.
De manera similar, me negaba a utilizar mails, incluso daba uno de un familiar cuando me pedían llenar alguna ficha o intercambiar un archivo, pero en cuanto empecé la facultad se presentó como una necesidad, hoy manejo cuatro cuentas ( según para qué la uso, el peso de los archivos que intercambio, las listas a la que estoy suscrito, etc).
En ambos casos, comencé defendiendo que la comunicación entre los humanos existió mucho antes de que aparecieran estas tecnologías y que, por lo tanto, estas no era imprescindibles, defendía que las necesidades por las cuales las justificamos, son creadas por estos nuevos aparatos (por ejemplo, la necesidad de saber todo el tiempo donde está una persona y comunicarse con ella para mí es una creación del mismo celular). Pero al final, las ventajas que traen se fueron imponiendo sobre mi postura apocalíptica y lentamente me fui integrando hasta llegar a ser algo no sólo habitual, sino pasando a ocupar un lugar destacado en mi vida.
Ahora sucedió lo mismo con Facebook. Al principio no le encontraba mucho sentido, pero luego entendí que tiene una mecánica interesante para intercambiar con otros, sobre todo en el caso de fotografías y artículos interesantes de otros sitios.
En este sentido, le abrí una cuenta al blog, por un lado, como una forma más directa de comunicarse con quienes les interese el tema y visiten el blog, apuntando a lograr mayor intercambio (yo solía no comentar mucho en blogs, pero si lo hago en esta línea), de manera más horizontal, con otros tiempos, etc.
Por otro lado, siempre me generan dudas sobre cuándo subir mis fotos trato de no publicar cualquier cosa, sino respetar el formato de cada “x” cantidad de días, subir toda una tanda de fotos que dé cuenta del estado de m huertita. Pero igual hay veces que me gustaría subir fotos descontextualizadas, solitas, sólo por lo lindas que son o lo que me representan; por ejemplo, ahora tengo unos tomatitos cherrys verdes re lindos y ese fue lo único que cambio desde la última fotogalería . Entonces no me da subir al blog una foto sólo de eso, ahora con facebook si puedo hacerlo, además tiene otra dinámica y los usuarios tienen una costumbre de ver fotos y comentar.
Si alguno le interesa, sólo se debe hacer clic en el logo que está en la barra de la izquierda y listo. Aclaro que hace poco que lo tengo así que, por ahora, mi uso es básico, aunque vengo tomando ritmo
Ahora sólo me falta engancharme y volverme adicto al Farm Ville l
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